A veces las personas no saben lo importante que llegan a ser para otros, ni cuanto se han hecho apreciar.
Conocimos a Italo Solimano Figallo, El Ingeniero, cuando, por medio del Adelina, la amiga peruana del alma, lo acogimos un par de días, con su hijo Giovanni, ya que salían de Barcelona para hacer un crucero por el Mediterráneo.
Y nos reencontramos en Lima, Perú, la Navidad y fin de año 2005 y Año nuevo 2006, y lo compartimos casi todo.
El pasado no importaba, el futuro se esperaba y se vivía el presente.
Chabuca Granda, la querida Chabuca, compuso la preciosa canción El puente de los suspiros, en 1960.
Y nos reencontramos en Lima, Perú, la Navidad y fin de año 2005 y Año nuevo 2006, y lo compartimos casi todo.
El pasado no importaba, el futuro se esperaba y se vivía el presente.
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